Piden investigar a sheriffs que mataron a joven hispano
LOS ÁNGELES/EFE — Familiares de un joven hispano, que fue muerto a tiros por agentes del Departamento del Alguacil de Los Ángeles (LASD), pidieron ayer a las autoridades investigar el incidente y considerar presentar cargos contra los oficiales que dispararon.
“Mi hijo no merecía esto. Tantos policías en contra de una sola persona, no es justo, su cuerpo está lleno de golpes y disparos. Quiero justicia para mi hijo”, dijo Estela Rodríguez, madre de la víctima.
Eduardo Edwin Rodríguez, de 24 años, murió la madrugada del pasado 14 de febrero, a raíz de un disparo después de que unos alguaciles detuvieran el vehículo donde viajaba como pasajero e intentaran arrestarlo.
Según los primeros informes del teniente Eddie Hernández del LASD a los medios, los agentes detuvieron una furgoneta que minutos antes estaba en el estacionamiento de un supermercado.
Ante las órdenes de los oficiales, la conductora y un pasajero habrían salido del vehículo, pero al parecer Rodríguez no obedeció argumentando que estaba buscando su celular.
El hecho desató un forcejeo entre el joven y los alguaciles que terminó cuando uno de los oficiales le disparó a Rodríguez.
“Los sheriffs (alguaciles) tienen una larga historia de corrupción especialmente en esta área del Este de Los Ángeles, especialmente contra los hispanos, las cárceles están llenas de méxico-americanos”, advirtió Carlos Montes, miembro de Community Service Organization (CSO).
La muerte de Rodríguez no sólo desató malestar entre los miembros de su familia, oriundos de Jalisco, México, sino que hoy decenas de residentes y activistas se manifestaron en contra de los supuestos abusos que está viviendo la comunidad por parte del LASD, justo en el lugar donde se desató el tiroteo.
De acuerdo a Abel Rodríguez, padre del joven que trabajaba como cajero en una tienda del área, el cuerpo de su hijo estaba lleno de moretones y heridas que revelan que antes de su muerte recibió varios golpes.
Para Montes, la muerte de Rodríguez, padre de dos niños de 3 y 7 años, es la muestra de un problema crónico de abuso.
“Denunciamos a Baca y todos sus atropellos y no nos creían, esto es lo mismo, es una cacería de hispanos nacidos aquí en Los Ángeles”, agregó.
Los nombres de los dos agentes implicados en el tiroteo no han sido revelados, situación que aumenta el descontento entre la comunidad.
“Quiero que me digan quién le disparó a mi hijo, quién lo mató sin darle una sola oportunidad”, indicó Estela Rodríguez.
Efe intentó comunicarse con el LASD, pero no obtuvo una respuesta inmediata sobre la investigación del caso.
El cadáver de Rodríguez será sepultado el próximo lunes.
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