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Riesgo de un brote de gripe aumenta en la frontera, en LA retan al gobierno

La política de "Permanecer en México" de la Administración Trump han agravado estos problemas de salud pública.
(AP)
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En respuesta a la reiterada insistencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), de que no proporcionará vacunas contra la influenza a los niños migrantes retenidos en la frontera, la Oficina del Consejo del Condado de Los Ángeles envía una carta instando a un monitor designado por el tribunal a obligar a la agencia fronteriza a proporcionar vacunas potencialmente vitales.

Se espera que el riesgo de un brote de gripe aumente en los próximos meses, ya que las tasas de inmigración generalmente aumentan a partir de febrero y continúan hasta la primavera, coincidiendo con la temporada alta de gripe en Estados Unidos.

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El problema, dicen los funcionarios de salud, es que en los últimos dos años, tres niños murieron por causas relacionadas con la gripe mientras estaban bajo custodia en la frontera. Antes de este tiempo, ningún niño había muerto bajo la custodia de CBP durante aproximadamente una década.

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Durante más de un año, la Administración Trump ha rechazado continuamente una recomendación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), de que CBP administre vacunas contra la gripe “en el punto de entrada más temprano posible” a los menores recluidos en sus instalaciones.

Otros expertos en salud pública, incluida la Academia Estadounidense de Pediatría, han instado de manera similar a la CBP a mejorar su nivel de atención.

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La política de “Permanecer en México” de la Administración Trump han agravado estos problemas de salud pública. Al colocar a los solicitantes de asilo en campamentos superpoblados que carecen de acceso a servicios básicos de saneamiento, atención médica y alimentos, el riesgo de que los niños migrantes caigan enfermos ha aumentado significativamente.

“La negativa de Aduanas y Protección Fronteriza a vacunar a los niños migrantes detenidos es desmesurada y miope, especialmente dado a que es la agencia responsable de crear las condiciones insalubres y hacinamiento en los centros de detención donde las enfermedades infecciosas, como la gripe, se propagan rápidamente “, dijo la supervisora del condado de Los Ángeles, Hilda L. Solís.

“Esta Administración tiene la responsabilidad moral de proporcionar atención humanitaria básica a los niños migrantes detenidos. Si los niños migrantes no son vacunados en el primer punto de entrada, pueden exponer a los residentes de la región al virus de la gripe una vez que lleguen al condado de Los Ángeles”, indicó.

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La carta fue presentada por el Consejo del Condado, el Proyecto de Derechos Públicos y O’Melveny & Myers LLP, los abogados que representan al Condado de Los Ángeles en este asunto, para monitorear a Andrea Sheridan Ordin, quien fue nombrado en 2018 luego de una decisión del Tribunal de Distrito de Estados Unidos.

El gobierno no había cumplido con sus obligaciones bajo el acuerdo de conciliación de Flores. El decreto de consentimiento de Flores, que data de 1997, requiere que el gobierno federal trate a los menores bajo custodia de inmigración con “especial preocupación por su vulnerabilidad particular” y que use instalaciones “seguras y sanitarias”.

Como monitor, Ordin está facultado para investigar los centros de detención fronterizos y reportar el incumplimiento al tribunal. La carta le pide a Ordin que se asegure de que cualquier acuerdo sobre las condiciones de los niños en la frontera requiera la vacunación en las instalaciones fronterizas de CBP.

“El rechazo flagrante de CBP a proporcionar atención médica de importancia crítica a los niños detenidos es ilegal y peligroso”, dijo Jonathan Miller, Director Legal de Public Rights Project, abogado del condado de Los Ángeles.

Desde el 1 de octubre de 2018 hasta el 31 de agosto de 2019, 3,350 niños inmigrantes no acompañados fueron entregados a un patrocinador que vive en el condado de Los Ángeles, el segundo número más alto en el país.

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