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Optimismo a medida que Ómicron alcanza su punto máximo en California, pero el nuevo subtipo BA.2 plantea interrogantes

Enfermero administra una prueba PCR de coronavirus a joven
El enfermero Jeffrey Toth administra una prueba PCR de coronavirus a Marshall Ted Lingad, de 18 años, afuera del Centro Médico Regional Arrowhead en Colton, el 11 de enero.
(Irfan Khan / Los Angeles Times)
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Existe un creciente optimismo de que el aumento general de Ómicron ha alcanzado su punto máximo en California, pero el progreso en todo el estado sigue siendo desigual.

La mejora es más pronunciada en lugares como el condado de Los Ángeles y el Área de la Bahía de San Francisco, donde los funcionarios de salud han expresado una mayor confianza en los últimos días de que la tasa de positividad de las pruebas de coronavirus, los nuevos casos diarios y las hospitalizaciones se han estabilizado o han comenzado a disminuir de manera convincente.

“Esta tendencia a la baja es alentadora e indica que es probable que hayamos superado el punto máximo de transmisión de Ómicron y estamos comenzando a ver una disminución real en la cantidad de personas recién infectadas”, señaló la directora de Salud Pública del condado de Los Ángeles, Bárbara Ferrer.

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Sin embargo, un problema potencial es la aparición de un subtipo de Ómicron.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho que la aparición del subtipo, llamado BA.2, está aumentando en muchos países. También se han encontrado dos casos en Santa Clara, el condado más poblado del norte de California.

“Realmente no sabemos lo que eso significa todavía. Lo descubriremos en los próximos días y semanas”, comentó la Dra. Sara Cody, oficial de Salud y directora de Salud Pública del condado. “Hasta ahora, no conocemos realmente cómo actúa”.

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El Dr. Peter Chin-Hong, experto en enfermedades infecciosas de UC San Francisco, informó el miércoles que no hay nada en los primeros datos, hasta este momento, que lo preocupe de BA.2.

“Y la razón por la que no estoy preocupado es porque confío en que, si se aplica un refuerzo, no terminará en el hospital”, comentó Chin-Hong. “No me preocupa que sea más mortal”, señaló, según los primeros datos de Dinamarca, pero agregó que “mantiene la mente abierta. Nunca se sabe lo que va a pasar. Tiene algunas mutaciones más. Pero me sorprendería si enfermara más”.

BA.2 seguirá siendo un riesgo para infectar a personas que no han sido inoculadas y que no han estado expuestas previamente a Ómicron. “Creo que nuestras vacunas y refuerzos seguirán funcionando”, señaló Chin-Hong.

Cody agregó que cree que aún vendrán más olas de coronavirus, pero no está claro cómo será la próxima, si será algo pequeño u otra gran montaña.

“Todavía hay mucha incertidumbre de lo que pueda llegar. No sabemos qué vendrá después”, explicó Cody en una asamblea pública el martes por la noche. “El mayor desafío para todos nosotros es que no podemos ver lo que sucederá en cada ocasión”.

El Dr. Anthony Fauci, principal asesor médico del presidente Biden, mencionó esta semana que no espera que el patrón de enormes variantes desafiantes que surgen dos veces al año dure para siempre.

“Lo que probablemente sucede cuando llegan oleadas de esto es que, después de un tiempo, hay suficiente inmunidad de fondo, ya sea por una infección junto con una inyección de refuerzo, o una vacuna más una dosis de refuerzo, o simplemente infección y recuperación del contagio, cuando lo ponemos todo junto, podemos tener un grado de inmunidad en la comunidad que, incluso si surgen nuevas variantes, no toman ese efecto de aumento que hemos visto con los cinco incrementos desde principios de 2020”, señaló Fauci en MSNBC el martes.

“Así que no creo que vayamos a ver eso indefinidamente”, detalló Fauci. “Creo que va a bajar y bajar. Y, francamente, cuantas más personas se vacunen y más recibamos refuerzos, menor será la probabilidad de que veamos el regreso de estas variantes que siguen desafiándonos”.

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Incluso a medida que mejora el número de casos, los funcionarios continúan instando a la precaución.

El número de casos “sigue siendo extraordinariamente alto” y “aún hay un número significativo de personas en el condado de Los Ángeles con enfermedades graves”, muchas de las cuales no están vacunadas, informó Ferrer.

“Ómicron fue una revelación, en parte porque las personas que se infectaron con Delta parecen no tener casi ninguna protección contra Ómicron”, señaló Ferrer el martes. “Y no creo que Ómicron sea nuestra última variante”.

Si bien es cierto que las personas no vacunadas que sobreviven a esta variante tendrán cierta inmunidad natural a la cepa, también hay evidencia de que no dura mucho, destacó Ferrer.

“Parece que la ciencia nos indica que todos estamos recibiendo la mejor protección, obviamente, de nuestras vacunas y refuerzos”, indicó.

Chin-Hong estuvo de acuerdo en que la inmunidad natural no ha sido suficiente para proteger a las personas de la reinfección. “La inmunidad de Delta no te protege de Ómicron”, informó.

Las personas que han sobrevivido a un episodio anterior de infección por coronavirus, pero aún se niegan a vacunarse, estarán en riesgo de infección futura a medida que se debilite la inmunidad natural. “Continuarán en riesgo porque se quedarán sin gasolina”, subrayó Chin-Hong sobre su inmunidad, similar a cómo un individuo parcialmente inoculado tiene un mayor riesgo de contagio.

Los nuevos datos muestran que las dosis de refuerzo confieren una eficacia vacunal significativa contra las visitas a la sala de emergencias. Frente a Ómicron, la efectividad del antígeno contra los traslados a la sala de emergencias y centros de atención urgente es solo del 38%, más de medio año después de la segunda dosis de una inyección de Pfizer o Moderna. Pero después de una dosis de refuerzo, la eficacia de la vacuna aumenta al 82%.

Efectividad de la vacunación
La efectividad vacunal con la segunda dosis de Pfizer o Moderna contra COVID-19, ante la sala de emergencias y las visitas de atención urgente, desciende al 38% más de seis meses después de esa inyección. Pero una dosis de refuerzo aumenta la efectividad de la vacuna al 82%.
(Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos)

El aumento de Ómicron en California parece haber alcanzado su punto máximo en la semana del 10 al 16 de enero, cuando el estado registró alrededor de 122.000 nuevos casos de coronavirus por día. Desde entonces, esa cifra se ha reducido a 94.000 casos diarios, según datos estatales publicados el miércoles que reflejan los contagios informados hasta el martes.

Aun así, la tasa más reciente sigue siendo aproximadamente el doble en comparación con el punto más alto del aumento que surgió el invierno pasado, mismo que alcanzó un máximo de 46.000 casos por día.

En todo el estado, la cantidad de hospitalizaciones positivas al coronavirus también se ha estabilizado en los últimos días y ya no aumenta drásticamente. El 19 de enero, el condado de Los Ángeles registró 4.814 pacientes, aproximadamente el 60% del máximo del invierno pasado, que consistió en una cifra de 8.098. Hasta el martes, ese censo había descendido a 4.534.

La transmisibilidad de Ómicron ha sido de un alcance tan impresionante que es difícil comprender cuántos californianos más se han infectado simultáneamente durante el último mes.

Desde el día de Año Nuevo, se ha reportado la asombrosa cifra de 2.5 millones de casos de coronavirus en California. Eso se acerca rápidamente a la suma total de contagios registrados en el estado durante todo el año pasado: 3.1 millones.

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En comparación con sus puntos máximos de Ómicron, las tasas diarias de casos de coronavirus se han reducido en un 32% en el condado de Los Ángeles, un 35% en el condado de Orange, un 25% en el condado de San Bernardino y un 20% en el condado de Ventura, según un análisis del Times de datos estatales publicados el miércoles.

A nivel regional, el sur de California, el Área de la Bahía de San Francisco y el Gran Sacramento también han observado disminuciones de aproximadamente el 25%.

“Ya pasamos el punto más alto”, mencionó Cody, la oficial de Salud del condado de Santa Clara. “Y estamos empezando a ver señales tempranas de que nuestros hospitales pueden estar obteniendo un poco de alivio”.

“Han sido varias semanas extraordinariamente difíciles. Pero creo que la propagación está empezando a bajar. Dicho esto, por supuesto, todavía es bastante alta”, señaló Cody.

Sin embargo, el Valle de San Joaquín y el norte rural de California aún no han comenzado una disminución persistente. En el sur de California, los condados de San Diego y Riverside todavía no han observado lo mismo.

L.A. County reported the highest single-day tally of COVID-19 deaths since March 2021 on Thursday.

La ola de Ómicron ha cobrado un precio mortal. En los últimos días, el condado de Los Ángeles ha promediado unas 60 muertes por COVID-19 diarias, durante un período semanal; una tasa que supera todas las oleadas pasadas excepto la del invierno anterior.

Si bien se ha hablado mucho de la naturaleza aparentemente más leve de Ómicron en comparación con otras variantes, Ferrer instó a las personas a hacer todo lo posible para evitar contagios. Eso incluye descartar reuniones no esenciales, especialmente en lugares cerrados donde no se usan cubrebocas, como restaurantes y bares.

Al hacerlo, explicó, ayudará a proteger a las personas vacunadas de infecciones de irrupción y a los vulnerables, como los adultos mayores, los individuos con problemas de salud subyacentes y los niños, demasiado pequeños para ser inoculados, de enfermedades.

“Si bien finalmente estamos dejando atrás a la ola, debemos seguir siendo cautelosos para reducir la transmisión a un nivel lo suficientemente bajo que imponga menos riesgo para los más vulnerables”, puntualizó Ferrer. “La alta tasa continua de transmisión crea mucho más riesgo”.

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Los desafíos permanecen. Mientras que 3 millones de residentes del condado de Los Ángeles han recibido vacunas de refuerzo, otros 3 millones de personas elegibles aún no lo han hecho. Eso es un problema, porque “seguimos viendo que el refuerzo reduce significativamente los casos, las hospitalizaciones y las muertes por COVID-19, particularmente con Ómicron”, señaló Ferrer.

Las personas que no están inoculadas tienen el doble de probabilidades de infectarse en comparación con aquellas que han sido vacunadas pero que aún no han sido reforzadas, detalló Ferrer. Pero un refuerzo proporciona más protección. Los individuos no inoculados tienen cuatro veces más probabilidades de infectarse en comparación con las que recibieron la dosis de refuerzo.

Las personas no vacunadas también tienen seis veces más probabilidades de ser hospitalizadas, en comparación con los individuos inoculados que aún no han recibido la dosis de refuerzo, y 24 veces más posibilidades de ser hospitalizadas, en contraste con quienes también recibieron el refuerzo, indicó Ferrer.

Solo un número muy pequeño de individuos completamente vacunados está muriendo de COVID-19, señaló Ferrer. Las personas no inoculadas tienen 15 veces más probabilidades de fallecer por COVID-19, en comparación con aquellos completamente vacunados.

An Israeli panel said research shows a fourth COVID-19 shot provides three to five times as much protection against serious COVID-19 as three doses.

Los funcionarios de salud están especialmente preocupados por las bajas tasas de inoculación entre los niños de 5 a 11 años. En el condado de Los Ángeles, solo el 30% de los niños de este grupo de edad han recibido al menos una dosis de la vacuna. En los barrios más pobres, solo el 22% de estos niños han recibido al menos una inyección, mientras que en las zonas más ricas la proporción es del 44%.

También hay disparidades raciales y étnicas. En este grupo de edad, solo el 16% de los niños latinos y el 17% de los negros han recibido al menos una dosis del antígeno, en comparación con el 37% de los niños blancos, el 45% de los nativos americanos y el 53% de los asiáticos americanos.

Las tasas de inmunización del condado de Los Ángeles están muy por debajo de las cifras de San Francisco, donde el 71% de los niños de 5 a 11 años han recibido al menos una dosis de la vacuna.

“Lamentablemente, esta disparidad puede conducir a tasas más altas de propagación y enfermedad en las mismas comunidades que ya han sido más afectadas por la pandemia”, señaló Ferrer.

California officials hope the return of state-mandated COVID-19 sick pay will encourage infected workers to stay home and help slow transmission.

El condado ha enviado la gran mayoría de sus cientos de eventos de vacunación móvil programados a las comunidades con menos recursos, informó Ferrer.

A pesar de que los hospitales en el condado de Los Ángeles ya no informan aumentos sostenidos en las hospitalizaciones positivas al coronavirus, las instalaciones siguen teniendo desafíos.

“Los hospitales todavía están bajo una presión inmensa debido a la escasez de personal”, expuso la Dra. Christina Ghaly, directora de Servicios de Salud del condado de Los Ángeles.

En los últimos meses, cientos de enfermeras con licencia del condado no han podido trabajar temporalmente debido a períodos de aislamiento o cuarentena relacionados con el coronavirus.

Dicho esto, el sistema de hospitales públicos del condado no ha tenido que declarar una crisis y no ha utilizado la opción de solicitar que regresen a laborar a los trabajadores de la salud infectados pero asintomáticos y con infecciones activas de coronavirus, a pesar de una regla estatal que permite que los hospitales lo hagan en situaciones críticas. El condado ha podido obtener ayuda en el área de enfermería por parte del gobierno estatal y federal, redistribuyendo enfermeras en áreas ambulatorias en el hospital y acelerando la contratación de enfermeras temporales.

“Incluso con estos esfuerzos, tenemos la escasez de enfermeras que se necesitan para ofrecer todas nuestras camas disponibles”, explicó Ghaly. Hay alrededor de 200 camas para pacientes hospitalizados sin uso debido a la escasez de personal en los cuatro hospitales públicos del condado de Los Ángeles, que se han visto obligados a posponer una serie de cirugías y procedimientos.

A parent who recorded the tirade said the man also coughed on the group of middle schoolers. Parents say he has repeatedly harassed their kids.

Los hospitales también continúan enfrentando dificultades para transferir pacientes en recuperación a otros lugares, como instalaciones que reciben pacientes de salud mental, señaló Ghaly.

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