Le hacen justicia a los ‘pochos’ en el béisbol mexicano

TIJUANA —  En septiembre de 2014 el Juzgado Primero de Distrito en Materia Administrativa de la Ciudad de México recibió una solicitud muy particular: el nacido en Texas de madre mexicana, Jesús “Jesse” Estrada, pidió un amparo contra las “acciones inconstitucionales” de la competencia de beisbol veraniego que no lo consideraba suficientemente azteca para ser registrado en la temporada 2015.

En aquel año todavía reinaba la regla 13.1 que discriminaba a los peloteros nacidos fuera de México y que según la Constitución eran considerados nuestros connacionales, pero para la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) eran extranjeros. La liga reviró y permitió un mexicoamericano por equipo más los seis extranjeros.

Estas acciones anticonstitucionales ya son cosa del pasado, a partir de la campaña 2016 del Rey de los Deportes en nuestro país, los beisbolistas que sean reconocidos como mexicanos por la Constitución, también serán reconocidos por la LMB.

En Tijuana, el club Toros es una clara muestra de que se aprovechará de este nuevo reglamento. Al estar ubicado en la frontera con los Estados Unidos es lógico que la novena fronteriza busque jugadores de ambos lados del muro divisorio. En el equipo habrá alrededor de quince “pochos”, teniendo menos jugadores nacidos en el país comparado al año pasado cuando llegó a la Final de la Zona Norte ante Acereros de Monclova, después de eliminar a Diablos Rojos del México. Este mismo fenómeno se puede ver en el futbol mexicano donde Xoloitzcuintles de Tijuana cuenta con la mayor cantidad de jugadores nacidos en Estados Unidos, pero de nacionalidad azteca, que cualquier otro equipo en el país. Al final la frontera manda y estas situaciones son menos escandalosas que en el resto de México.

Pero no todo es miel sobre hojuelas, la nueva reglamentación podría perjudicar al beisbol de nuestro país, aseguran sus detractores, al permitir que los equipos cuenten con más jugadores nacidos fuera de México, cerrándole la puerta a los nacidos en territorio nacional. El verdadero efecto de esta decisión se verá al final de la temporada 2016 donde se podrán ver si el talento de los nacidos aquí es suficiente para pelear por una plaza en el roster o los nacidos en el extranjero ofrecieron mejores dividendos para las novenas de la LMB.

Por lo pronto el beisbol mexicano le hizo justicia a los “pochos” y estos podrán traer su talento a nuestro país buscando entregar grandes resultados que demuestren que el cambio de regla fue para el bien del Rey de los Deportes en tierra azteca.