Victorias de Rubio y Kasich en sus estados nublarían el futuro inmediato de Trump

AGENCIA REFORMA/MÉXICO —  El de hoy es un nuevo Súper Martes.

Cinco estados celebran elecciones primarias de ambos partidos --Florida, Illinois, Misuri, Carolina del Norte y Ohio--, pero la jornada es especialmente decisiva para el bando republicano.

Y es que para este partido, en Florida, Illinois y Ohio el ganador de los comicios se lleva todos los delegados en juego, a diferencia de la repartición proporcional más común en el proceso.

El total de delegados en juego es más de una tercera parte de los mil 237 que se necesitan para alcanzar la nominación republicana.

Tal es el peso, que, por ejemplo, Florida y Ohio reparten en conjunto 165 delegados, más de todos los que hasta ahora ha cosechado Marco Rubio (163).

La de hoy puede ser de hecho la última jornada electoral del proceso 2016 en la que participe el senador por Florida, quien podría poner fin a su campaña de no vencer en su entidad -- una en la que Donald Trump le supera en intención de voto de acuerdo con todas las encuestas--.

Un sondeo divulgado ayer por la Universidad de Quinnipiac coloca a Trump 24 puntos por encima de Rubio en el estado, con 46 por ciento de las preferencias frente al 22 por ciento del legislador.

“Las encuestas están locas y lo voy a demostrar mañana (hoy)”, aseguró Rubio en Jacksonville.

Para John Kasich, Gobernador de Ohio, una derrota en su estado podría también significar el punto final de su aspiración presidencial.

Pero si Rubio y Kasich salieran victoriosos de sus respectivas entidades, el futuro inmediato de Trump se nublaría y Ted Cruz conservaría la esperanza de alcanzarlo.

En el bando demócrata, las encuestas pronostican una ventaja amplia para Hillary Clinton sobre Bernie Sanders, a excepción de Illinois y Misuri, que podrían dar la sorpresa.