Asume el nuevo gobernador de Carolina del Norte en medio de puja legal
Charlotte (NC) — En medio de un enfrentamiento con la Asamblea General legislativa, de mayoría republicana, debido a la aprobación de dos leyes que limitan su poder, el demócrata Roy Cooper juramentará como nuevo gobernador de Carolina del Norte pasada la medianoche del último día del año.
En una ceremonia privada en el Capitolio estatal, en Raleigh, Capital del estado, y acompañado por su familia y colaboradores personales, Cooper se convertirá en el 75º Gobernador de Carolina del Norte tras prestar juramento ante el juez Mark Martin.
El nuevo gobernador estatal iniciará su gestión en un ambiente convulsionado políticamente.
El jueves 5 de enero la corte verá una demanda interpuesta por Cooper contra la ley SB 4, una de las dos legislaciones aprobada por la Asamblea General de Carolina del Norte, de mayoría republicana, en una sesión especial celebrada a mediados de diciembre para limitar su poder.
La entrada en vigor de la SB 4, prevista para el 1 de enero, quedó bloqueada por una decisión tomada el viernes 30 de diciembre en Raleigh por un juez del condado de Wake.
La SB 4 despoja al gobernador de la capacidad de designar a la mayoría de los miembros de la Junta Estatal de Elecciones.
Además, amplía de cinco a ocho el número de miembros de la Junta, de los cuales cuatro serán nombrados por el gobernador y cuatro por la Asamblea.
El cambio impedirá que la nueva Junta Electoral Estatal pase a ser dominada por los demócratas con los nombramientos de Cooper, lo que los abogados del nuevo gobernador consideran una violación a la Constitución estatal.
“La Asamblea General aprobó un proyecto de ley que, entre otras cosas, cambia radicalmente la estructura y composición de la agencia ejecutiva responsable de administrar las leyes electorales de nuestro estado”, expresa la demanda.
“Esos cambios son inconstitucionales porque violan las disposiciones de separación de poderes consagradas en la Constitución de Carolina del Norte trasladando el control de esa agencia a la Asamblea General y no al gobernador”, afirmaron.
La otra ley, la HB 17, limita el poder de Cooper para nombrar a sus miembros del gabinete, quienes ahora requerirán la aprobación del Senado, y reduce el número de altos funcionarios que el gobernador entrante podrá despedir o designar en su administración.
Además quita poder a la Junta de Educación del estado, la cual presentó una demanda esta semana objetando la constitucionalidad de transferir la responsabilidad de la supervisión de la Junta al nuevo superintendente, el republicano Mark Johnson.
Al igual que la SB 4, esta ley no entrará en vigencia el primer día del año por resolución de un juez del condado de Wake.
Los especialistas predicen un largo camino legal antes de que ambas leyes sean bloqueadas o aprobadas definitivamente en los tribunales.
Suscríbase al Kiosco Digital
Encuentre noticias sobre su comunidad, entretenimiento, eventos locales y todo lo que desea saber del mundo del deporte y de sus equipos preferidos.
Ocasionalmente, puede recibir contenido promocional del Los Angeles Times en Español.