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Por lo menos 20 personas murieron y 26 resultaron heridas en el tiroteo de El Paso

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Un hombre con un rifle enloqueció el sábado en un concurrido centro comercial de esta ciudad fronteriza de Texas, matando al menos a 20 personas antes de que la policía lo detuviera, dijeron las autoridades.

En una conferencia de prensa a última hora de la tarde, las autoridades dijeron que el sospechoso, identificado como un hombre blanco de 21 años del suburbio de Allen, Texas, había publicado un manifiesto lleno de odio antes de emprender los tiroteos, donde por lo menos 26 personas resultaron heridas.

Un oficial de la ley le dijo a Associated Press que el sospechoso detenido era un hombre del área de Dallas llamado Patrick Crusius.

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Los medios de comunicación han identificado a Patrick Crusius, de 21 años, como el sospechoso del mortal tiroteo de al menos 20 personas el sábado en un centro comercial de El Paso.

El funcionario no estaba autorizado a hablar públicamente sobre la investigación en curso y conversó con AP bajo la condición de que se mantuviera en el anonimato.

En la conferencia de prensa, la representante estadounidense Verónica Escobar, demócrata que representa al área de El Paso, dijo que se necesita hacer más para abordar el tema del odio.

“La narrativa del manifiesto está alimentada por el odio y el racismo, la intolerancia y la división”, dijo Escobar.

Afirmó que El Paso no sólo ha sido una comunidad segura, sino que ha hecho todo lo posible por ayudar a los migrantes. “Esta persona es alguien que vino de fuera de nuestra ciudad para hacernos daño”, dijo.

EEUU TIROTEO. Las autoridades de El Paso (Texas) confirmaron que hay varios muertos como consecuencia del tiroteo ocurrido este sábado en un centro comercial de esa ciudad.

El jefe de policía de El Paso, Greg Allen, dijo que el manifiesto “indica un nexo potencial con un crimen de odio”. Afirmó que la policía estaba investigando fotografías del sospechoso con un rifle de asalto publicado en los medios de comunicación social.

El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, elogió a los oficiales por “confrontar directamente al tirador, conseguir desarmarlo” y lograr una “justicia rápida”.

Abbott, en sus comentarios, se centró en el tema de los trastornos mentales, señalando que después de un tiroteo el año pasado en el que murieron 10 personas en una escuela secundaria de Santa Fe, Texas, una de las mayores lecciones para evitar los tiroteos masivos es abordar la enfermedad mental. “La salud de la mente contribuye en gran medida a cualquier tipo de agresión o violencia con disparos”, dijo.

Un individuo armado con un fusil AK-47 comenzó a disparar en un centro comercial de El Paso.

El sargento Robert Gómez dijo que la policía respondió a las llamadas de emergencia de un tirador activo en un Walmart en el lado este de la ciudad y en el cercano Centro Comercial Cielo Vista, ambos llenos de compradores por la temporada de regreso a la escuela una semana antes de que comiencen las clases en Texas.

La Secretaría de Relaciones Exteriores de México informó que entre los heridos se encontraban seis ciudadanos mexicanos.

Aunque algunos testigos inicialmente reportaron múltiples tiradores, Gómez dijo que la policía había descartado eso por ahora.

Afirmó que la policía de El Paso había asegurado el centro comercial y que estaba investigando con el departamento del sheriff local, el FBI y otras agencias federales de aplicación de la ley.

Gómez dijo que entre los que respondieron al tiroteo se encontraban oficiales de policía fuera de servicio. Ningún oficial disparó sus armas, y el sospechoso “fue detenido sin incidentes”, aseguró.

El Centro Médico Universitario de El Paso dijo que había recibido 13 víctimas del tiroteo, y el Centro Médico Del Sol confirmó haber atendido 11.

“Esta es la temporada de regreso a clases”, dijo el representante César Blanco, quien trabajó en el Cielo Vista Mall cuando era adolescente y lo visita con frecuencia. “Es tan triste que estos tiroteos masivos estén ocurriendo por todo el país”.

Según Gómez, la mayoría de las víctimas de los disparos se encontraban en Walmart, el cual estaba lleno de gente, con hasta 3.000 compradores y 300 empleados. Un video gráfico publicado por un testigo en Facebook mostraba cuerpos en el estacionamiento de Walmart y gente pidiendo ayuda mientras sonaban las sirenas.

“Esto no tiene precedentes en El Paso”, dijo Gómez.

El ex representante de Texas Beto O’Rourke, un nativo de El Paso que hace campaña para la presidencia en un foro en Las Vegas el sábado, anunció que regresaba a casa con su familia.

“Estoy increíblemente triste y es muy difícil pensar en esto, pero les diré que El Paso es el lugar más fuerte del mundo”, dijo con la voz quebrada. “Esta comunidad se unirá”.
O’Rourke comentó que había hablado con el alcalde y las fuerzas de seguridad y que todavía están tratando de entender los detalles del tiroteo. “Pido la fuerza de todos para El Paso ahora mismo. Todo el mundo está decidido a asegurarse de que esto no siga ocurriendo en este país”, dijo.

Los testigos publicaron en Internet un video en el que se podían escuchar disparos repetidos. Describían una escena caótica dentro del centro comercial.

Analisa Sonora Flores, de 44 años, había llegado a Walmart poco antes de las 11 de la mañana para pagar una cuenta cuando escuchó disparos que, según ella, sonaban como un rifle automático.

“No es el 4 de julio”, dijo, recordando sus pensamientos iniciales. “Esos no son fuegos artificiales”.

Fue entonces cuando empezó a gritar, en inglés y español, “¡Corran, corran, corran, corran!”.

“El lugar estaba más lleno de lo habitual porque la escuela comienza pronto”, dijo.

Flores y otros huyeron por una puerta trasera y subieron una colina pasando por una sala de cine donde una mujer estaba hiperventilando, diciendo: “Hay muchos, muchos, muchos” en español.

Flores no estaba segura si la mujer se refería a muchos tiradores o víctimas.

En el centro comercial, Priscilla Zavala y su marido habían llevado a sus cuatro hijos a comprar juguetes en Build-A-Bear cuando estalló el tiroteo.

“Oímos un disparo y todos corrían hacia Dillard’s, fue una locura”, aseguró Zavala, de 32 años. “Los hombres fueron a ver que estaba ocurriendo mientras las mujeres permanecían asustadas y agarraban a todos los bebés.” Ella dijo que los empleados de la tienda cerraron la puerta principal, apagaron la música que se escuchaba y le dieron a cada niño un osito de peluche para tranquilizarlo mientras se refugiaban en un cuarto trasero.

“Sabía que estaban aterrorizados, podía verlo en su cara. Su ansiedad iba en aumento”, dijo Zavala sobre sus hijos de 11, 9, 6 y 4 años.

Podían ver a la gente fuera de la tienda, corriendo.

“Mi hijo dijo: ‘¿Está el asesino ahí fuera?’” comentó Zavala. “Podíamos oír al equipo SWAT diciéndoles: ‘¡Agáchense, levanten las manos!’ Creo que intentaban averiguar quiénes eran los buenos y cuáles eran los malos”.

Zavala dijo que su esposo, quien es soldado, quería ir a buscar al tirador, pero ella lo detuvo, preocupada por sus hijos.

Después de unos 20 minutos, un equipo de SWAT levantó la puerta de seguridad de la tienda y les permitió salir, dijo: “Pero teníamos que mantener las manos en alto. Así sabían que estábamos a salvo”. Al buscar la salida del centro comercial, Zavala oyó a la policía gritar: “¡Estamos dejando salir a las víctimas!

“Lo que más me afectó fue que me llamaran víctima. Porque en medio de todo el incidente no me di cuenta de que lo éramos”, dijo. “Eso es lo que somos. La gente no se percata que lo que están haciendo nos daña a todos. Es triste que mis bebés estén creciendo en este mundo. Lo odio. Odio vivir así”.

El presidente Trump tweeteó sobre el tiroteo, diciendo: “Los informes son muy malos, muchos muertos”.

Las escritoras del Times Melissa Etehad y Yadira Flores en Los Ángeles, el escritor David Montero en Las Vegas, la corresponsal especial Ingrid Giese en El Paso y Associated Press contribuyeron a este informe.

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