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La cadena de moda Forever 21 solicitó la quiebra, y suma 178 tiendas al apocalipsis minorista

Forever 21 store at Santa Monica Place
Una tienda Forever 21 en Santa Monica Place.
(Kent Nishimura / Los Angeles Times)

La empresa privada con sede en Los Ángeles dice que cerrará hasta...

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Forever 21 Inc. se declaró en bancarrota, uniéndose así a la creciente lista de minoristas de moda que son derribados por la fuerte competencia, los altos alquileres y la deserción de los compradores a los puntos de venta por las compras en línea.

La presentación del capítulo 11, este domingo en Wilmington, Delaware, permite que Forever 21 siga operando mientras elabora una estrategia para pagar a sus acreedores y modificar el negocio. El plan hasta ahora incluye cerrar 178 de sus aproximadamente 800 tiendas.

Hace casi una década, antes de que existieran los influenciadores de Instagram, Forever 21 ayudó a las adolescentes a vestirse como sus celebridades favoritas, por poco dinero.

En total, el minorista emplea a unos 6.400 trabajadores a tiempo completo y a 26.400 de forma parcial, según documentos judiciales. Forever 21 afirmó que espera abandonar la mayoría de sus puntos de venta en Asia y Europa, y cerrará el total de sus 44 tiendas canadienses, que brindan alrededor de 2.000 empleos, según declaraciones de la compañía.

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La presentación citó 11 arrendamientos que la firma quiere cancelar para tiendas que aún no abrieron sus puertas, incluyendo dos para Forever 21 y nueve para su marca de belleza y bienestar, Riley Rose. Renunciar a las nuevas tiendas de Riley Rose reduce drásticamente los planes de la compañía para expandir la marca, que actualmente maneja sólo 15 puntos de venta.

La empresa le pidió al juez Kevin Gross, especializado en bancarrotas de EE.UU, que establezca reglas para cancelar los arrendamientos de las tiendas que decida liquidar.

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Forever 21 se especializa en ropa de moda rápida: imitaciones modernas, económicas y de diseños originales, que a menudo se usan sólo unas pocas veces antes de ser regaladas o desechadas. Sus competidores incluyen Zara, H&M y Amazon.com.

Alguna vez popular entre los adolescentes en la década de 2000 por sus diseños asequibles pero llamativos, las exclusivas bolsas de compras de color amarillo brillante de Forever 21 se volvieron más inusuales a medida que los consumidores de la Generación Z, aquellos nacidos a partir de 1998 en adelante, pasaron rápidamente al comercio electrónico y las prendas urbanas.

La declaración de quiebra podría ayudar a Forever 21 a deshacerse de las tiendas no rentables y recaudar fondos nuevos, lo cual permitiría a la compañía privada y familiar reestructurar su negocio en crisis para una nueva generación. Mientras tanto, las tiendas esperan respetar las tarjetas de regalo, devoluciones y cambios.

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Forever 21 obtuvo $275 millones en financiamiento a deudores en posesión (DIP), de prestamistas con JPMorgan Chase & Co. como agente, así como $75 millones en capital nuevo de TPG Sixth Street Partners y sus fondos afiliados.

“La clave para llevar a cabo con éxito esta reestructuración es la velocidad y la cooperación”, señaló la compañía en documentos judiciales. “Las instalaciones DIP de Forever 21 están altamente condicionadas para avanzar rápidamente en estos casos con el apoyo de las principales partes interesadas, incluidos prestamistas, vendedores comerciales y propietarios”.

Los minoristas en quiebra enfrentan más presión de tiempo que otras compañías en el Capítulo 11 porque la ley les exige que decidan dentro de los 120 días qué arrendamientos mantendrán y cuáles rechazarán. Forever 21 planea pedirle a Gross más tiempo para tomar esa decisión.

La declaración de quiebra siguió a meses de discusiones con las partes interesadas sobre cómo salvar el negocio. Las más importantes son los mayores propietarios de los locales más grandes del minorista, incluidos los dueños de los centros comerciales Simon Property Group Inc. y Brookfield Property Partners LP.

Forever 21 sostuvo conversaciones con Simon y Brookfield sobre un acuerdo previo a la quiebra, que les habría otorgado una participación en la compañía a cambio de consideraciones que podrían haber incluido la condonación de la renta, informó Bloomberg News a principios de este mes. Sin embargo, esas conversaciones se interrumpieron, y la semana pasada la empresa se preparó para los procedimientos judiciales sin un acuerdo en la mano.

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El minorista está negociando con sus propietarios más grandes para “ajustar la dimensión” del impacto de sus tiendas, señaló el jefe de reestructuración de la compañía, Jonathan Goulding, de Álvarez & Marsal, en una declaración judicial. Si bien las partes intercambiaron propuestas, comentó, no han llegado a un acuerdo. Sólo cuatro propietarios tienen casi el 50% de los arrendamientos de la compañía, señaló.

Forever 21 le debe a varios prestamistas al menos $227.7 millones, incluidos $194.5 millones en préstamos respaldados por activos, un préstamo a plazo de $20 millones y una deuda no garantizada de $950 millones de pesos filipinos (18.3 millones de dólares) adeudados a una compañía con sede en Filipinas llamada Praxton Commercial Corp.

“En una época en que el comercio minorista, como la mayoría de los estadounidenses lo sabe, está sufriendo, Forever 21 tiene la intención de utilizar estos procedimientos para seguir siendo viable y escribir un final diferente al de tantas empresas”, expresó Goulding. “El objetivo de estos casos del Capítulo 11 es claro: emerger con un negocio independiente viable y factible, y mantener vivo el sueño”.

Forever 21 contrató asesores antes de la bancarrota para idear un cambio. Su plan, explicó Goulding, incluye cerrar las tiendas que pierden dinero y reducir los costos en las restantes, disminuir las flotas de entrega de tiendas locales, hacer crecer su negocio de comercio electrónico y reenfocar el marketing en clientes de alto gasto.

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La solicitud de quiebra de Forever 21 podría ser problemática para los principales propietarios de centros comerciales de EE.UU, incluidos Simon y Brookfield, porque es uno de los inquilinos más grandes aún en pie después de una ola de quiebras. Estas operaciones vaciaron más de 12.000 tiendas en los últimos dos años, y esas vacantes pueden ser difíciles de llenar.

Simon cuenta con Forever 21 como su sexto mayor inquilino, excluyendo las grandes tiendas por departamentos, con 99 puntos de venta que cubrían 1.5 millones de pies cuadrados al 31 de marzo, según una presentación judicial.

Simon y Brookfield fueron incluidos en los documentos de la corte en el recuento de Forever 21 de los mayores acreedores no garantizados. El minorista no tiene mucha influencia sobre sus propietarios, según Bloomberg Intelligence, que dijo en un informe, el viernes último, que Forever 21 representa sólo el 1.4% de la renta anual de Simon.

Jin Sook y Do Won Chang fundaron Forever 21, primero llamado Fashion 21, en 1984, después de emigrar de Corea del Sur. Chang trabajó como conserje, asistente de una gasolinera y empleado de cafetería, mientras que Sook era estilista, y la pareja ahorró $11.000 durante tres años para crear la tienda minorista, afirmó Goulding.

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La primera tienda, un espacio de 900 pies cuadrados en Highland Park, vendió $700.000 en mercadería durante su primer año, según muestran documentos judiciales. Forever 21 creció rápidamente y empleó a 43.000 en su apogeo, con más de $4.000 millones en ventas anuales.

El cofundador Chang se centró en mantener una participación de control en Forever 21, algo que obstaculizó los esfuerzos para recaudar nuevos fondos. Es probable que todos los asuntos estén fuera de su alcance ahora, ya que los acreedores suelen establecer la agenda en los procedimientos de quiebra y las decisiones importantes quedan sujetas a la aprobación de un juez.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí

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