La batiseñal brilló en el cielo de L.A. ante una multitud entusiasmada y disfrazada

Los Ángeles —  Pese a que la serie televisiva en la que interpretaba a Batman dejó de grabarse hace casi 50 años, Adam West se encuentra vivo en el corazón del pueblo angelino.

O eso es al menos lo que parecía indicar el evento de homenaje que se llevó a cabo anoche en el centro de la ciudad, más precisamente, alrededor del ayuntamiento, y que convocó a mucha más gente de la que se esperaba.

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Claro que, si se observaba a los cientos y cientos de asistentes, era evidente que muchos de ellos habían acudido a celebrar al Hombre Murciélago en términos más generales, como lo demostraron los disfraces empleados, que reproducían distintas épocas del personaje y se inspiraban también en sus colegas y enemigos, lo que le dio a la actividad entera un aire festivo y de lo más colorido.

De ese modo, antes de que cayera la noche, la gente empezó a llegar en masa a las inmediaciones del ayuntamiento de L.A., una urbe que podría ser fácilmente parte del imaginario de los cómics a pesar de que Ciudad Gótica (la de Batman) se basó en Nueva York. Sea como sea, West, que nació en el estado de Washington, vivía desde hace mucho en nuestra ciudad y falleció en esta el pasado 9 de junio, lo que justificaba desde ya el tributo local.

En vista de que la masa fue mucho mayor de la esperada, se dieron algunos problemas logísticos con la ubicación de la prensa, ya que en determinado momento, los asistentes comunes y corrientes empezaron a quejarse a gritos de los fotógrafos que estaban parados frente al podio ubicado en las escalinatas de la alcadía para los discursos de presentación; finalmente, los hombres de prensa que se encontraban en ese sector se sentaron, aunque no hubo realmente mucho espacio para moverse si se trabajaba para un medio de comunicación.

La fiesta empezó antes de la ceremonia, gracias sobre todo a la presencia de dos batimóviles que llamaron mucho la atención; hasta donde sabemos, uno de ellos fue usado en el programa original. El elemento novedoso era el inmenso pedestal que se encontraba cerca y que representaba a la famosa batiseñal, cuyo encendido se había anunciado como el momento culminante de la ceremonia.

Antes de eso, el alcalde Luis Garcetti dio un mensaje que inició de manera muy teatral, como si se encontrara metido en el universo de los cómics para agradecer al “cruzado encapuchado” por todo lo que había hecho por la ciudad, generando con ello la sensación de estar en medio de una película hollywoodense y provocando de paso la euforia de los concurrentes.

Poco después, el politico volvió a la realidad para agradecer la presencia de la familia de West, porque los invitados incluyeron a su viuda y a sus hijos, así como a Lee Meriwether, la actriz que hizo de Catwoman en el filme de 1966, y, claro está, a la estrella no declarada de la noche: Burt Ward, el inolvidable intérprete original de Robin en la pantalla chica.

De hecho, el momento más emocionante para los fans se dio cuando Ward subió al escenario para hablar de West, a quien definió como “mi muy querido amigo, con el que según mis cálculos trabajé el 75 por ciento del tiempo que he tenido en este planeta” (después de la serie, ambos participaron en incontables convenciones, series animadas, videojuegos y hasta una película adicional del 2003).

“Era un hombre de familia, un esposo maravilloso, un gran padre y un amante de la Humanidad al que ya no tenemos físicamente, pero sí espiritualmente”, precisó el actor de 71 años. “Si él estuviera aquí, diría que estamos en este planeta por muy poco tiempo, y que hay que hacer lo mejor que puedas en él, así como ser amable con la gente”.

“Estamos en un mundo difícil, porque los únicos villanos no son los de la pantalla; pero él hubiera querido que cada uno de ustedes estuviera feliz, porque se pasó la vida tratando de que este mundo fuera lo mejor”, concluyó.

Tras el encendido de la señal (cuya luz brotaba en realidad de un proyector ubicado al frente de la alcaldía, no del que se encontraba al pie de las escalinatas, que era un elemento de utilería), la muchedumbre permaneció por largo tiempo en el lugar, conversando, jugando y tomándose fotos no solo con los automóviles ya descritos, sino también con los fans de todas las edades que habían llegado enfundados en llamativos disfraces.

No faltaba por ahí el Batman excesivamente voluminoso o la señora mayor que pretendía ser Gatubela, por supuesto; pero muchos aprovecharon el instante para ostentar atuendos perfectamente diseñados y para dar cuenta de su parecido con figuras emblemáticas del mundo de los superhéroes, como sucedió con el tipo que lucía un impresionante parecido con el Joker de Heath Ledger (el mismo que, por supuesto, no pertenece a la versión de West).

Llamaron también la atención las muchachas esculturales que se dejaron ver en trajes alusivos a personajes femeninos como Catwoman (Gatúbela en español), Batgirl y, por supuesto, Harley Quinn, la villana que salvó del desastre total a la reciente superproducción “Suicide Squad” gracias a la interpretación de Margot Robbie.

Finalmente, agradecemos el hecho de que se haya respetado al menos la devoción por el mundo vinculado al Hombre Murciélago, porque no vimos, por ejemplo, a nadie disfrazado de Wonder Woman ni de otras figuras ajenas a los confines de la Ciudad Gótica; a fin de cuentas, los presentes parecían tener una meta en común.