Demi Lovato cantará el himno nacional en el Super Bowl. ¿Es realmente una buena idea?

La idea de Demi Lovato de tomar las cosas con calma mientras vuelve a su carrera simplemente dio un giro interesante.

La cantante, que ha estado en modo de autocuidado desde su sobredosis de 2018, ha anunciado que cantará el himno nacional en el Super Bowl LIV el próximo mes.

Ese sería el mismo Super Bowl anual que Nielsen dice atrajo a una audiencia de 98.2 millones de personas en los Estados Unidos y provocó 32.3 millones de interacciones en las redes sociales el año pasado.

Sin presión.

“Es importante recordar que esta vez soy muy cauteloso en volver a saltar a las cosas”. Realmente he decidido tomarme mi tiempo con las cosas “, dijo Lovato en la Cumbre Teen Vogue 2019 en noviembre. “Cuando sea el momento adecuado, lo publicaré. Me muero por lanzar nueva música ... pero todo a su debido tiempo “.

Parece que se acerca el tiempo.

Lovato tendrá una carrera en seco de alto perfil el 26 de enero cuando suba al escenario en los Premios Grammy de este año, pero definitivamente no cantará “The Star-Spangled Banner” en ese espectáculo. Esa es una gran, gran diferencia.

La melodía patriótica ha atormentado a muchos, incluso antes de que la canción se convirtiera en un tema nacional además de un himno nacional.

Gladys Knight noqueó en el gran juego del año pasado, no hay problema, una vez que resistió una tormenta relacionada con Colin Kaepernik, pero la actuación de Christina Aguilera en 2011 todavía tiene el título para el peor fracaso del himno del Super Bowl. Xtina mezcló la letra al comienzo de la canción, convirtiéndose instantáneamente en el saco de boxeo de Estados Unidos, y luego culpó de estar “atrapada en el momento”.

Aaron Neville, el fallecido Dr. John y la fallecida Aretha Franklin, todos talentos serios, no tocaron la letra, pero su actuación en el Super Bowl de 2006, que incluyó un coro de gospel completo, quedó totalmente destrozada. “[Estos] elementos se sumaron a algo que simplemente no nos dejó sintiéndonos bien”, dijo Billboard. “Perplejo, tal vez, y seguramente incómodo. Pero definitivamente no es bueno”.

Los errores en etapas más pequeñas de deportes profesionales han sido igual de atroces o incluso peores.

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Fergie lo convirtió en una banda sonora burlesca llena de estrellas en el Juego de Estrellas de la NBA de 2018. Draymond Green, de los Golden State Warriors, se volvió viral cuando su reacción de boquiabierto se convirtió en risa, y el comentarista deportivo Charles Barkley bromeó durante el espectáculo de medio tiempo de TNT de que “necesitaba un cigarrillo” después de que ella cantara.

El himno es “increíblemente difícil de cantar. Tiene un rango increíblemente amplio. Necesitas una voz baja increíblemente fuerte y una voz alta increíblemente fuerte también”, dijo Brian Zeger, director artístico de artes vocales en la famosa Juilliard School en Nueva York. City, hablando con The Times en 2012 después de que Steven Tyler, de Aerosmith, intentara una vez más la canción patriótica.

Esos requisitos cubren solo el desafiante rango de octava y media de la canción. En cuanto a las letras a menudo sopladas, originalmente eran un poema. Ese poema se estableció en una canción popular británica. Como resultado, las palabras y la música “no encajan muy bien”, dijo Zeger. Además, el idioma tiene más de 200 años. Por lo tanto, incómodo.

Zooey Deschanel hizo un buen trabajo con el himno en la Serie Mundial de 2011, pero fue criticada por abandonar el juego temprano (resultó que tuvo que tomar un avión para ir a trabajar al día siguiente).

Luego estaba la interpretación chillona de Roseanne Barr en un juego de los Padres de San Diego al azar, no televisado de 1990, el fallo por el cual se miden todos los demás fallos.

Lo que podría haber sido un gesto obsceno cuando terminó no ayudó, y al día siguiente estaba siendo destrozada a nivel nacional por grupos de veteranos, locutores de radio e incluso el tipo que cantó el himno durante años antes de los juegos de los Yankees.

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“Canté unas cuatro notas y pensé que estaba bien”, dijo Barr en una conferencia de prensa dos días después del incidente de julio de 1990. “Y luego todo el mundo comenzó a abuchearme y realmente pasé por esta cosa de pánico, y por un momento pensé:” Bueno, ¿puedo salir de aquí? ¿Puedo darme la vuelta y simplemente renunciar? “

“Sabía que no podía y sabía que tenía que terminarlo”, dijo. “Así que hice lo mejor que pude. No estoy buscando disculparme por hacerlo. Fue la elección equivocada para todos nosotros. Pero nadie anticipó que sería tan negativo “.

Y en ese sentido, le deseamos mucha suerte, Demi. Solo tómalo con calma.

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