Médicos en Puerto Rico preocupados por falta de datos mujeres embarazadas con zika
San Juan — Varios médicos puertorriqueños criticaron hoy al Departamento de Salud (DS) local por dejar de desglosar las estadísticas de las mujeres embarazadas contagiadas con zika debido a que, indican, el Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) se habría hecho encargada de los datos.
Así lo dejaron saber hoy la obstetra-ginecóloga Carmen Zorrilla y los epidemiólogos Luis Bonilla y Cruz María Nazario, sobre el desconocimiento desde diciembre pasado de los datos en el Sistema de Vigilancia Activa de Zika en Embarazos (SVAZE) del DS y que aparece publicado en la página oficial de la agencia.
“Me preocupa el no tener la información, y en parte es un reclamo de que esa información debe estar disponible”, afirmó Zorrilla en una rueda de prensa para anunciar el XXXVII Foro de Investigación y Educación del Recinto de Ciencias Médicas (RCM) de la Universidad de Puerto Rico (UPR), que se celebrará entre mañana y el próximo viernes.
En el SVAZE aparece desglosado los casos de infección por el virus del Zika por estado de embarazo y semana de inicio de síntomas o toma de la muestra, y porcentaje de personas con resultados positivos de infección por la epidemia que causó el año pasado en Puerto Rico el transmisor del mosquito Aedes aegypti.
Igualmente, se encuentra el porcentaje de mujeres embarazadas con evidencia de laboratorio de infección por el virus del Zika por trimestre del embarazo cuando ocurrieron los síntomas o cuando se realizó la prueba y los municipios de residencia de las mujeres embarazadas con evidencia de laboratorio de infección por el virus.
Zorrilla contó que todos los viernes desde enero de 2016, había una curva de embarazadas con zika “y era exponencial, hubo un aumento acelerado y este año se iba aplanando la curva, pero sigue habiendo embarazadas con zika”.
“En mi opinión: No se han desaparecido, no se han eliminado”, dijo Zorrilla.
La revelación de datos sobre el zika, el cómo se ha llevado la investigación de la epidemia en Puerto Rico, así como la desigualdad de la salud en la niñez de la isla y la crisis del sistema de salud local, serán algunos de los temas que se discutirán en el foro anual que arranca oficialmente mañana en el RCM.
Según contó Zorrilla, el DS comenzó un programa activo de identificación de embarazadas positivas a la prueba de zika y devaluación de expedientes e infantes de lo que estaba pasando desde que se registró el primer caso en la isla, pero se dejó de publicar hasta diciembre pasado.
“Desde entonces, no hay ninguna información de embarazadas ni resultados por el DS”, aseguró Zorrilla, quien participará en un panel el miércoles junto a Bonilla y Nazario sobre la problemática del zika en Puerto Rico.
En dicho panel, Zorrilla presentará, desde su perspectiva como investigadora que ha trabajado con mujeres embarazadas con zika, “qué no sabemos y asuntos que me preocupan principalmente con condiciones que afectan en los niños e implicaciones a largo plazo”.
Allí, Zorrilla elaborará los comportamientos “de lo normal a lo severo” que sufren los niños nacidos con microcefalia, que es cuando un infante nace con la cabeza de un tamaño menor y su relación de contagio con zika de su madre embarazada.
Zorrilla detalló que los casos más severos de niños con microcefalia es que entre el 20 y 50 % sufren de ceguera, muchos tienen problemas de audición, sufren de epilepsia, algunos no tragan bien y a otros les tienen que entubar para poder comer.
“El énfasis sobre la mujer embarazada es porque es la más vulnerable a virus”, abundó la médico.
Nazario, a su vez, quien culpó a CDC por ser el ente oculto de las estadísticas de las mujeres embarazadas con zika, dijo que debido a esto, es que en Puerto Rico siguen naciendo niños con microcefalia, pero sin tener relación con el virus.
“La gente tiene que reconocer que hay un problema. No podemos funcionar con una estrategia de miedo de que van a quedar embarazadas con problemas. El miedo ni el terror no es lo que ayuda, sino la información válida, oficial y útil para saber más con otras enfermedades que se espera que puedan venir”, enfatizó.
Nazario indicó que en Puerto Rico, por una alegada orden del CDC, en el año 2000 se dejó de recoger información de microcefalia en la isla, lo que “creó una crisis bastante importante de cuánto podíamos estar relacionándolo con el zika”.
Bonilla, por su parte, recomendó implantar una política pública en Puerto Rico ante enfermedades como el zika y educar a las agencias federales de cómo deben trabajar con estas epidemias.
“Necesitamos mayor información de esos funcionarios. ahora mismo Nazario y Zorilla están haciendo su trabajo, pero no tienen el escenario completo de lo que está pasando en el país para saber de perspectiva de manera micro y macro en la isla”, sostuvo.
Bonilla criticó también al CDC por asignarle 13 millones de dólares al Fideicomiso para Ciencia, Tecnología e Investigación de Puerto Rico para crear la Unidad de Control de Vectores local.
“Eso fue un disparate de política pública de salud, porque existe el Departamento de Salud. Eso fue traído por los pelos y acomodado ahí. Esos 13 millones estarían mejor fortaleciendo el sistema de vigilancia”, alegó.