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La mexicana Zarazúa trabaja y sueña con un lugar entre las 100 del mundo

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El esfuerzo, la disciplina y el juego que ha mostrado la tenista mexicana Renata Zarazúa en su corta carrera han generado esperanzas de que con ella a la vanguardia el tenis femenino mexicano logre volver a los primeros planos.

De 19 años, Renata Zarazúa lleva el tenis en la sangre y un apellido que intenta defender, ya que en el siglo pasado varios de sus ancestros destacaron en este deporte.

Su bisabuela Rosario llegó a ser campeona nacional y su tío abuelo Vicente jugó en el equipo mexicano de Copa Davis entre 1960 y 1970.

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“Mi meta es estar entre las mejores 100 del mundo en el ránking de la WTA (Asociación Femenina de Tenis Profesional)”, expresó Zarazúa en una entrevista con Efe.

Pero antes de los resultados, para Renata, quien ocupa el puesto 298 en la clasificación mundial, lo más importante es disfrutar de su carrera antes que pensar en lo lejos que pueda llegar.

“Quiero que el tenis me deje algo bueno en mi vida y siempre estaré satisfecha de mí como persona y jugadora por lo que he logrado y lo que pueda lograr”, añadió.

Zarazúa es una de las jugadoras con opciones de reanimar a medio plazo la delicada situación del tenis femenino latinoamericano, a día de hoy con solo tres representantes entre las cien primeras del mundo: la puertorriqueña Mónica Puig (puesto 69), la paraguaya Verónica Cepede (85) y la brasileña Beatriz Haddad (97).

Sin embargo, la mexicana consideró que el tenis femenino a nivel Latinoamérica “vive un buen momento” ya que hay varias jugadoras, entre ellas Puig, campeona olímpica en Río 2016, “que han tenido buenos resultados últimamente”.

“Eso ayuda a motivarnos para seguir adelante”, enfatizó.

Aseguró que los esfuerzos individuales y familiares, como en su caso, son los que sacan adelante a las jugadoras.

“Pero no solo (ocurre) en México y América Latina, en muchos países es así”, apostilló.

Zarazúa es la jugadora más consistente en los últimos años en México y considera que, junto con sus compatriotas Victoria Rodríguez, Giuliana Olmos, Ana Sofía Sánchez y Marcela Zacarias, ha formado “una buena generación”.

“Hacemos buen equipo, nos llevamos bien y eso ayuda a tener mejores resultados cuando representamos a México”, declaró a Efe.

Afirmó que para destacar en el tenis cada jugadora debe “sacar provecho de sus virtudes” y descartó que a las mexicanas les haga falta estado físico, mentalidad o apoyo económico.

“Cada jugadora es diferente y tiene distintas necesidades y si puedes cubrir esas necesidades puedes destacar”, apuntó Zarazúa.

Ella se abre camino en el tenis “trabajando y entrenando con mucha pasión y disciplina día con día para alcanzar el mejor nivel”, con un equipo detrás en el que destaca su padre.

Hasta el momento, Zarazúa acumula experiencia en torneos de la Federación Internacional de Tenis (ITF); suma diez títulos de dobles, entre ellos dos este año y el último el 23 de junio, cuando se acreditó el doble del torneo ITF de 25.000 dólares de Ystad, Suecia, junto a la rusa Valentina Ivakhnenko.

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