EEUU investiga el bombardeo que causó la muerte de tropas afganas
Washington — El Departamento de Defensa anunció que investiga el bombardeo que sus tropas efectuaron hoy en el sur Afganistán y que resultó en la muerte por error de varios soldados afganos, informó a Efe un portavoz del Pentágono.
“Hemos notificado a los funcionarios afganos de este incidente. Se llevará a cabo una investigación para determinar las circunstancias específicas que llevaron a este incidente”, explicó el vocero.
El portavoz también trasladó a las familias de las víctimas del ataque por fuego amigo “las profundas condolencias” de Estados Unidos, aunque no detalló cuántas personas han resultado heridas y cuántas han muerto.
El incidente se produjo en el distrito de Gereshk, en la provincia de Helmand, en el sur de Afganistán, donde el Ejército de EEUU bombardeó por error un edificio tomado recientemente por las tropas afganas.
El incidente se produjo durante una operación antiterrorista de las fuerzas afganas en la que las tropas internacionales proporcionaban apoyo, según detalló en Afganistán el director de comunicación de las tropas de Estados Unidos y la OTAN en el país, Bill Salvin.
Los insurgentes perpetraron este jueves en Gereshk tres atentados con coche bomba y lanzaron ataques coordinados contra las fuerzas afganas, pero fueron detenidos con apoyo aéreo de Estados Unidos y la llegada de refuerzos de los aliados.
Las fuerzas aliadas continúan en Afganistán con alrededor de 13.000 efectivos en tareas de asesoramiento y capacitación y Estados Unidos mantiene a cerca de 8.400, como parte de ese operativo de asistencia y en tareas antiterroristas.
Estados Unidos, que se ha marcado como objetivo para 2017 derrotar completamente al EI en Afganistán, estudia una nueva estrategia para sus fuerzas en el país asiático.
Desde el fin de la misión de combate de la OTAN en enero de 2015, los insurgentes han ganado terreno en diversas partes de Afganistán y en la actualidad controlan, tienen influencia o se disputan con el Gobierno al menos el 43 % del territorio, según datos del Ejecutivo estadounidense.
