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La jefatura de la Policía de Puerto Rico rechaza una crisis en el seno del cuerpo

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EFE

La jefatura de la Policía de Puerto Rico rechaza una crisis en las fuerzas de seguridad tras los últimos incidentes protagonizados por miembros del cuerpo, afectado por el abandono de cientos de agentes por discrepancias salariales.

El comisionado de la Policía de Puerto Rico, Henry Escalera, salió hoy al paso de las denuncias del complicado estado de las fuerzas del orden de la isla para negar una posible crisis, después de que el miércoles un agente del cuerpo tomará varios rehenes en unas oficinas de Guaynabo, municipio cercano a San Juan.

Aunque no se sabe con certeza la razón por la que el agente de la Policía tomó como rehenes a clientes y empleados de la Cooperativa Caribe Federal Credit Union, el incidente ha vuelto a poner en centro de la atención mediática la situación por la que atraviesan las fuerzas de seguridad de la isla.

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El agente de la Policía, identificado como Gabriel Hernández, protagonizó el suceso portando un arma de fuego, un hecho insólito que ha provocado consternación y del que sólo ha trascendido que el miembro de las fuerzas de seguridad quería enviar un mensaje.

El incidente coincidió con la información de que más de mil policías en Puerto Rico se ausentaron de sus puestos durante Fin de Año, situación que podría extenderse hasta la festividad de Reyes tras acogerse a licencia por enfermedad, medida en respuesta a desacuerdos laborales.

La difícil situación en el seno de la Policía tiene su origen, entre otras razones, en las deudas millonarias de los salarios de los agentes y los recortes en sus pensiones, razón de que cerca de mil agentes abandonaran el cuerpo a lo largo de 2018.

“Tenemos unas ayudas, unos mecanismos como los capellanes, oficinas de sicología en las trece áreas y en las oficinas centrales”, señaló Escalera como medidas para atajar los problemas que sufren los agentes, como el caso del que retuvo a varias personas en Guaynabo, que se limitó a justificar su conducta por el deseo de comunicar un mensaje, sin que hayan trascendido más detalles.

Escalera indicó sobre las palabras del agente que en la Policía hay canales para expresarse si un miembro de las fuerzas del orden se siente incómodo por alguna razón.

El superior de Escalera y secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP) del Gobierno de Puerto Rico, Héctor Pesquera, rechazó hoy que la Policía esté atravesando una situación de crisis.

“Coger un incidente como el de ayer y empezar a machacar que esto son presiones indebidas no creo que es lo correcto”, dijo Pesquera en una entrevista.

El funcionario negó que los agentes de la Policía sufran cansancio y trabajen más horas de las permitidas por la ley, despejando así la posibilidad de que el autor del incidente llevara a cabo la acción como protesta por sus condiciones laborales.

Medios locales apuntan que durante 2018 cerca de 1.800 agentes de la Policía fueron referidos a la División de Sicología y Trabajo Social, lo que da a entender que existen problemas en el seno del cuerpo a nivel generalizado.

El presidente del Concilio Nacional de Policías (Conapol), Edwin Robles, señaló recientemente a Efe sobre la ausencia generalizada de sus compañeros que la carga de trabajo se va acumulando sobre los agentes que permanecen en el cuerpo, debido a que anualmente abandonan el cuerpo cerca de 800 agentes.

Para paliar las deudas salariales, en las pasadas semanas se realizó un desembolso de casi 13 millones de dólares, para compensar atrasos que se remontan al año 2004.

Los agentes de la Policía policías rechazan además la Ley 3-2017, norma que disminuye sus pensiones, de un 75 % de su salario al momento de su retiro a un poco más de un 38 %.

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