La argentina Gallay empieza “a ciegas” su defensa del oro en vóley
Lima — La jugadora argentina de vóley-playa Ana Gallay comenzó este miércoles, “casi a ciegas”, su camino para revalidar la medalla de oro en los Juegos Panamericanos al admitir que apenas conoce a las parejas de Guatemala y Nicaragua, sus primeras rivales en Lima 2019.
Tras ganar cómodamente a las guatemaltecas Paola Alvarado y Estefanie Bethancourt por 21-11 y 21-15, la argentina reconoció que ni ella ni su compañera Fernanda Pereyra conocían a sus rivales.
“No sabíamos con qué nos íbamos a encontrar. No conocíamos a las chicas y no encontramos ningún vídeo. Ellas seguro que nos tienen que haber visto a nosotras”, explicó Gallay tras el partido.
Lo mismo admitió que les ocurre con la pareja nicaragüense compuesta por Swan Mendoza y Lolette Rodríguez, a las que se enfrentarán este jueves para después medirse a Canadá, el rival más difícil de su grupo.
“Esto recién está comenzando. Tenemos que estar tranquilas y confiadas en que el juego va a salir, ya que a veces la ansiedad y los nervios te pueden a hacer fallar, y una vez dentro de la cancha, mucha energía”, indicó Gallay.
La voleibolista apuntó que frente a la pareja de Guatemala les costó encontrar su juego y por ello abogó “siempre por salir a la cancha respetando al rival”.
Contra Nicaragua esperan otro partido duro, “como siempre”, lo que les exigirá salir “concentradas para darlo todo” desde el mismo inicio.
Gallay consideró que junto a Pereyra tendrá opciones de repetir el oro panamericano si logran mantener su juego, no tener baches y ser sólidas.
“Cuando somos sólidas, somos muy difíciles de ganar”, advirtió la jugadora de 33 años, quien desde hace año y medio juega con Pereyra, de 28 años, después de que se retirase su anterior compañera, Georgina Klug, con la que ganó el oro en Toronto 2015.
Gallay manifestó su alegría por haber sido prácticamente la primera deportista en entrar en escena en los Panamericanos entre los 6.680 participantes que competirán en 61 disciplinas deportivas, a pesar del día gris y con neblina que tuvo la Costa Verde de Lima, frente al océano Pacífico.
“Cada lugar tiene sus características climáticas. Estos dos últimos meses estuvimos en Europa y solo una vez jugamos en la playa. El vóley-playa se juega cada vez menos en la playa. Es cierto que el clima está un poco fresco pero al menos estamos al lado del mar”, señaló.
Sobre la organización de los Juegos, Gallay consideró que es “excelente, con una infraestructura espectacular” que le dejó sorprendida.
