Anuncio

Gobierno mexicano mantiene plan de austeridad y considera una reforma fiscal

Share via
EFE

El Gobierno de México reafirmó este miércoles su compromiso con la austeridad y la lucha contra la corrupción, al tiempo que reconoció la necesidad de efectuar una reforma fiscal con el propósito de recaudar más impuestos para financiar sus proyectos de infraestructura y sociales.

En su discurso de clausura de un foro económico organizado por el Grupo Financiero Banorte, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que sin corrupción y con austeridad se puede financiar el desarrollo sin necesidad de aumentar los impuestos, el costo de los servicios o la deuda pública.

Declaró que su Administración, iniciada el 1 de diciembre del año pasado, está llevando a cabo una profunda transformación de la vida pública del país porque está dispuesta a “erradicar la corrupción, que es el peor problema de México”.

Anuncio

“No solo es moralizar la vida pública; es también ahorrar, que todo lo que se fuga por el caño de la corrupción se utilice para financiar el desarrollo, y no es poco”, expuso, y añadió que además se busca tener “un Gobierno austero, sobrio”.

El presidente argumentó que el presupuesto nacional no puede limitarse a mantener el aparato burocrático, “porque entonces no se pueden liberar fondos para el desarrollo y el bienestar”.

Para ilustrar el ahorro que se logra con los esfuerzos de austeridad refirió que el año pasado solo la Presidencia tuvo un presupuesto de 3.000 millones de pesos (152,5 millones de dólares), mientras que en lo que va de 2019 se han ejercido 350 millones de pesos (17,8 millones de dólares).

Y con la previsión de cerrar el año con 600 millones de pesos (30,5 millones de dólares).

“Sin corrupción y con austeridad se puede financiar el desarrollo sin aumentar los impuestos ni crear nuevos, sin incrementos en los servicios y sin seguirnos endeudando. Todo este año no ha crecido la deuda pública y proyectamos para el año próximo lo mismo”, enfatizó.

No obstante, dijo que no basta con la austeridad y el combate a la corrupción, sino que se requiere que haya crecimiento, para lo cual su Administración realiza cuatro acciones: Fortalecer la economía popular, impulsar la inversión del Estado, alentar la inversión privada y fomentar la inversión extranjera.

“Estas cuatro acciones se van a consolidar y vamos a crecer”, aseguró López Obrador.

El producto interno bruto (PIB) de México se contrajo 0,2 % en el primer trimestre de 2019 frente al periodo octubre-diciembre del año anterior, mientras en el segundo creció un magro 0,1 % respecto al anterior, de acuerdo con reportes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Pese a ello, López Obrador mantiene que México crecerá al 2 % este año y, durante su sexenio, a un promedio del 4 % anual.

Previamente en el mismo foro, el subsecretario mexicano de Hacienda y Crédito Público, Gabriel Yorio, reconoció la necesidad de modificar la estructura fiscal para lograr una mayor recaudación a medio plazo y de esa forma poder financiar los gastos previstos del Gobierno.

“Hay una estructura que es necesario reformular y creemos que con criterios de equidad y de impacto en la economía tenemos que establecer una nueva estructura de impuestos”, expuso.

Yorio señaló que López Obrador “ha sido muy claro que en este momento no podemos incrementar impuestos”.

Adelantó que en los próximos dos o tres años el Gobierno se enfocará en combatir la evasión fiscal, y que existe una iniciativa a este respecto que está siendo discutida en el Congreso.

“Tenemos este claro mandato. Lo vamos a ejecutar y vamos a ir de manera paralela discutiendo cuáles son las potenciales acciones que podríamos llevar al Congreso para una potencial reforma fiscal”, puntualizó.

En su oportunidad, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, indicó que la institución a su cargo trabaja en torno a tres ejes para impulsar desde el ámbito de sus atribuciones la actividad económica y garantizar la gobernabilidad.

“El primero es el fortalecimiento del mercado interno, que se conseguirá con una política de recuperación salarial y una estrategia de creación de empleos productivos, permanentes y bien remunerados”, dijo.

El segundo eje, indicó, es “consolidar a México como un destino confiable para la inversión, para lo cual retomamos en camino de crecimiento con austeridad y sin corrupción, disciplina fiscal férrea, cero endeudamiento y respeto irrestricto a las decisiones autónomas del Banco de México”.

Y el tercero es “reconstruir el Estado de derecho para garantizar la seguridad de las personas y las empresas”, acotó.

A su vez, el gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, dijo que la economía mexicana se ha desacelerado más de lo previsto y ha aumentado la brecha entre su crecimiento potencial y el real.

“Esta desaceleración ha sido mayor a lo que se había anticipado, y el entorno externo no ha ayudado”, declaró Díaz de León.

Refirió que la economía está por debajo de su crecimiento potencial, y que esta tendencia se ha acentuado en los últimos trimestres. “Hay cierta capacidad no utilizada en la economía, y esto explica la desaceleración”, sostuvo.

Anuncio