Rain drenches Tijuana migrant camp

Las autoridades mexicanas reubicaron a los migrantes de un refugio atiborrado que está cerca de la frontera con Estados Unidos hacia un salón de eventos alejado del cruce fronterizo.

El viento llevó el agua a zonas expuestas. Los baños quedaron inundados y no había papel higiénico...

Muchos migrantes que esperan cruzar a Estados Unidos no se quieren alejar tanto de la frontera. Pero las autoridades de Tijuana ya no ofrecerán comida y servicios médicos en el inundado complejo deportivo Benito Juárez...

Tras las lluvias, se formó un gran charco de barro donde la gente tomaba duchas en el exterior junto a una hilera de inodoros portátiles malolientes.

En el campamento principal, la gran mayoría de los centroamericanos estaban en recintos improvisados hechos de mantas amarradas y láminas de plástico o en tiendas de campaña endebles.

un migrante carga sus cosas rumbo a un nuevo refugio. La preocupación había estado creciendo por las condiciones insalubres en el complejo deportivo, donde los migrantes dormían en pequeñas tiendas de campaña en medio del lodo.

Se reportan casos de infestaciones de liendres y piojos, así como muchas infecciones respiratorias.

“Esto ya es inmanejable”, dijo Edgar Corzo, quien dirige la división de los derechos para migrantes de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México. En el hacinamiento “cualquier cosa se puede esparcir y tenemos cuatro casos de varicela que están contenidos, pero es un riesgo”.