Según entrenador de UCLA, Jaime Jaquez se benefició de ser parte de México en los Panamericanos

Jaime Jaquez sintió el peso de las pancartas que tendían en el Edwin W. Pauley Pavilion la primera vez que visitó la legendaria arena de UCLA mientras vestía la camiseta del equipo al que eligió representar en su etapa universitaria y no precisamente porque las cargó sino por los nombres que colgaban.

Cada uno de esos estandartes representa logros, los 11 títulos conseguidos por la institución y nombres de basquetbolistas que dejaron una huella en el programa universitario. Pero al mexicoamericano, no necesariamente le quita el sueño ver su nombre en las vigas pero sí es uno que quisiera lograr.

Entre los nombres que cuelgan en el gimnasio y arena, están los de Bill Walton, Kareem Abdul Jabbar, Russell Westbrook, Kevin Love, entre otros.

“El primer día que caminé aquí y vi todos estos nombres colgados y los campeonatos… es historia”, dijo Jaquez a LA Times en Español en la Russell Westbrook Court localizada en el Mo Ostin Basketball Center de UCLA. “Cuando caminas al Pauley Pavilion de UCLA y ves todas esas pancartas y poder decir que soy parte de eso, de esta hermandad con la gente que jugó aquí antes y los que jugarán después, es historia, es increíble ser parte de esto”.

La carrera de Jaquez inició en la secundaria de Camarillo, en donde también jugó béisbol y tuvo un gran impacto. Poco a poco se fue ganando el interés de las universidades más importantes de Estados Unidos, que buscaban sus servicios.

El prospecto llegó a UCLA clasificado entre los mejores 100 jugadores del país, promediando en su último año de preparatoria 31.7 puntos, 12.7 rebotes, 3.7 asistencias y 2.1 robos.

Aunque sus números bajaron tan pronto inició la temporada de la NCAA, el entrenador de UCLA, Mick Cronin, dijo que conocía muy bien las capacidades del mexicano. Según el entrenador, su labor con el equipo es diferente a cuando estaba en la secundaria, en donde era uno de los principales anotadores.

“La clave para Jaime es la paciencia”, explicó el entrenador. “En Camarillo anotaba un millón de puntos casi literalmente. Su ajuste más grande ha sido el entender que no tiene que anotar cada vez que tiene el balón y solo por eso se ha convertido en un muy buen jugador... muy buen jugador. Su porcentaje de disparo está por lo cielos y no pierde el balón tanto como antes”.

Cronin ha visto el crecimiento rápido de Jaquez en muy poco tiempo.

“Ha madurado”, señaló. “Es un luchador, tiene mucha entrega, busca cada balón perdido y eso no es algo que yo puedo tomar crédito”.

Sin embargo, Cronin detalló que mucho de ese crecimiento se debe también a la aparición de Jaquez con el equipo mexicano en los Juegos Panamericanos en donde el Tricolor no tuvo una buena participación.

“Creo que aprendió y entendió contra qué tipo de jugadores se estaba enfrentando cuando jugó allá”, dijo Cronin. “No sé qué tanto jugó pero definitivamente fue una experiencia. Se enfrentó a jugadores que no están en la NBA y estaba muy sorprendido por lo físico que es, además de lo difícil que era”.

Para Jaquez, el decidirse por la selección mexicana sobre la estadounidense fue una decisión que tomó después de que no logró compenetrarse con el quinteto de las Barras y las Estrellas juvenil.

“Siempre lo pensé, lo tenía, como dicen ‘en la parte de atrás de mi cabeza’, pues mi papá siempre hablaba de eso”, recordó Jaquez. “Jugar con el equipo mexicano, después de que con Estados Unidos no funcionó, entonces pensamos ‘vamos a México a jugar allá’ y aprender ese estilo de básquetbol. Fue una decisión de familia pero obviamente yo quería jugar allá. Pero siempre como familia tomamos decisiones”.

México ocupó el séptimo lugar de los Panamericanos y Jaquez no tuvo mucha participación, empero el jugador señaló que la experiencia ha sido vital para su crecimiento como jugador y por lo que vive actualmente con UCLA en la NCAA.

“Fue muy importante acercarme a los muchachos del equipo”, señaló el jugador. “Me ayudaron mucho durante mi tiempo con el equipo, de la manera cómo se juega internacionalmente. Fue un buen tiempo para unirnos. Mi español ha mejorado, pero también hay jugadores que hablan inglés, entonces eso también facilitó las cosas aún más”.

Con respecto a la decisión del entrenador mexicano, que anunció que no llevaría al certamen a varios de los jugadores considerados más importantes del equipo, señaló que “probablemente lo hizo para mejorar, mantenernos juntos, jugar como equipo. Mejorar para la siguiente de ronda de juegos como las pre-olimpiadas”.

De sus compañeros del equipo mexicano aprendió maneras para desenvolverse mejor en la lengua de sus antecesores.

“Me encanta la música mexicana, también lo nuevo como Bad Bunny, reggeaton, porque muchos de los muchachos me dicen que para aprender español tengo que escuchar música, pero no sé si sea la mejor opción para aprender… pero tienes que empezar en algún lado, ¿Cierto? (risas)”.

Tradiciones navideñas

Durante la época decembrina, Jaquez aprovecha para disfrutar de su extensa familia, que aún reside en Camarillo y parte en Guadalajara. La comida y la convivencia es de lo que más lo deleita.

“Me gustan los tamales de pollo… mi abuela nos hace pozole y vamos a su casa, abrimos regalos, comemos juntos, nos divertimos y tenemos una fiesta familiar. No los veo tan seguido como antes, pero trato de ir cuando tengo algo de tiempo, sea en los fines de semana o cualquier día de la semana”.

Sobre las tradiciones navideñas, señaló que su familia ha adoptado de ambas culturas.

“Tenemos un árbol de Navidad grande, con regalos, fotos, cantamos y bailamos mucho (risas)… en inglés y en español, tenemos de todo”, contó Jaquez.