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¿Se siente deprimido? No está solo, y quizá debería buscar ayuda

Con la propagación del nuevo coronavirus, los expertos dicen que es importante cuidar su salud mental junto con su bienestar físico.
Con la propagación del nuevo coronavirus, los expertos dicen que es importante cuidar su salud mental junto con su bienestar físico.
(Getty Images)

Con la propagación del coronavirus, los expertos en salud mental aconsejan a la gente que preste atención a cualquier sentimiento de ansiedad o depresión

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No es exagerado decir que hay mucho de qué preocuparse en este momento. Es por eso que los expertos en salud mental aconsejan a las personas que presten atención a cualquier sentimiento de ansiedad o depresión.

“El brote de la enfermedad del coronavirus 2019 puede ser estresante para las personas”, informaron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. “El miedo y la ansiedad por una enfermedad pueden ser abrumadores y causar emociones fuertes en adultos y niños.

“Hacer frente al estrés lo hará a usted, a las personas que le importan y a su comunidad más fuertes”.

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Sin embargo, para muchas personas, eso puede ser más fácil decirlo que hacerlo.

Trabajar desde casa puede crear sentimientos de soledad y aislamiento. Los estantes vacíos de las tiendas son profundamente angustiantes. Ni siquiera hablemos del mercado de valores.

“Nos llevará algún tiempo ver los efectos a largo plazo de esta situación en la salud mental, pero tiene muchos de los ingredientes que pueden afectar negativamente la salud mental de las personas de manera significativa”, dijo Jutta Joorman, profesora de psicología en la Universidad de Yale.

“Lo que me preocupa particularmente de esta crisis es el riesgo de aislamiento social”, señaló. “Muchas herramientas para enfrentarlo incluyen interacciones sociales y apoyo, y es difícil tener que pasar una crisis como la de ahora que requiere distancia física”.

John Weisz, profesor de psicología en la Universidad de Harvard, dijo que el estrés relacionado con el coronavirus puede representar un punto de inflexión para las personas que ya han experimentado niveles elevados de ansiedad.

“Las personas muy ansiosas a menudo temen cosas que no entienden completamente, y evitan estrictamente situaciones que consideran peligrosas, en parte porque no están seguras de cómo evaluar el peligro o qué comportamientos podrían exponerlos al riesgo”, expuso.

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La depresión puede conllevar un estigma a los ojos de algunos, un signo de debilidad o inestabilidad. Del mismo modo, algunas personas intentarían evitar cualquier discusión sobre salud mental, creyendo (erróneamente) que la ansiedad o el miedo no requieren atención adicional durante los períodos inusualmente caóticos.

He escrito sobre mis propios problemas con la depresión y el desafío de destetarme de los antidepresivos.

Enumero aquí algunos puntos. Primero, no hay nada extraño o inusual en los sentimientos de tristeza o impotencia en tiempos de extrema coacción. Le pasa a todo el mundo.

En segundo lugar, la experiencia de todos es única y debe manejarse como tal. Un caso de coronavirus no es necesariamente lo mismo que la depresión clínica. Tal vez quiera consultar a un profesional, tal vez no. Es su decisión.

Si elige buscar ayuda, no es un signo de debilidad, sino todo lo contrario. Tomar la iniciativa para tratar estos asuntos requiere fuerza y coraje.

Finalmente, todos encuentran su propio camino de regreso a la luz. En algunos casos, eso puede implicar una conversación o dos con un terapeuta. En otros, podría implicar un remedio farmacéutico, como fue mi caso.

Lo que sea que funcione. No permita que la experiencia de otra persona dicte sus propias acciones.

Fredric Rabinowitz, profesor de psicología en la Universidad de Redlands, dijo que la pandemia de coronavirus “representa una ruptura en la realidad cotidiana que hará que las personas usen cualquier mecanismo de supervivencia que haya funcionado en el pasado”.

“Para algunos, es tomar el control”, señaló. “Para otros, es protegerse a toda costa”.

Para aquellas personas que simplemente están abrumadas, la única solución puede ser “evitar lidiar con la realidad de la situación”, indicó Rabinowitz.

Los CDC dicen que los individuos que pueden ser más susceptibles al estrés por el coronavirus incluyen aquellos con mayor riesgo de infección, como las personas mayores y con enfermedades crónicas.

Los niños y adolescentes pueden ser propensos a la confusión en momentos como estos y requieren apoyo y orientación adicionales, según la agencia.

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Además, una enfermedad de rápida expansión puede exacerbar los desafíos para cualquier persona con una condición de salud mental preexistente o un problema con el abuso de sustancias.

Esto es lo que debe observar, según los CDC:

-Cambios en el sueño o patrones de alimentación.

-Dificultad para dormir o concentrarse.

-Empeoramiento de los problemas de salud crónicos.

-Mayor uso de alcohol, tabaco u otras drogas.

Joorman de Yale aconsejó seguir las rutinas diarias y sentirse cómodo con ese comportamiento.

“Levántese a la hora que normalmente se levanta, incluso si ahora trabaja desde casa”, indicó. “Haga un plan diario para los niños, y tal vez aborde algunas de las tareas que generalmente pospone, como limpiar la casa, el jardin u organizar el garaje. Salga a caminar, haga ejercicio, disfrute de un tiempo libre”.

Quizá lo más importante, no se obsesione con mantenerse al día con cada nuevo desarrollo del coronavirus. “Es conveniente desconectar de vez en cuando”, observó Joorman.

Los CDC aconsejan lo mismo: “Tómese un descanso de ver, leer o escuchar noticias, incluidas las redes sociales. Escuchar repetidamente sobre la pandemia puede ser molesto”.

También dice que las personas deberían intentar hacer ejercicio, estirarse o meditar, lo que sea que le ayude a encontrar su lugar feliz.

“Hable con personas de confianza acerca de sus preocupaciones y cómo se siente”, sugirió el CDC.

El gobernador de California dijo que la mayoría de las escuelas del estado probablemente permanecerán cerradas por el resto del año escolar debido al coronavirus.

Hemos escuchado del presidente Trump y otros que esto eventualmente pasará, y eso es cierto. Puede parecer que no hay nada más que nubes de tormenta en el horizonte, pero el sol siempre regresa.

“Tenga en cuenta lo que está sucediendo y que todos están siendo afectados, no sólo usted”, dijo Rabinowitz de la Universidad de Redlands. “Esto significa que a pesar de los llamados al distanciamiento social, en realidad estamos todos juntos en esto”.

Y a medida que acepta los sentimientos que está experimentando, tal vez por primera vez, piense en aquellos que han lidiado con emociones tan pesadas.

“Parte de lo que estamos experimentando ahora, durante este conjunto o circunstancias muy inusuales, se asemeja a lo que las personas con ansiedad severa experimentan de forma rutinaria, incluso cuando no hay coronavirus”, señaló Weisz de Harvard.

Incluso sin una pandemia, estamos todos juntos en esto.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

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