Documental sobre De la Hoya detalla la complicada relación con su difunta madre e hijos
El film dirigido por el cineasta ecuatoriano Fernando Villena indaga también en el poco tiempo que tuvo para prepararse para el éxito, el dinero y la fama; además de sus adicciones, su matrimonio fallido y fotografías vergonzosas
El exboxeador Óscar de la Hoya hace un par de años se acercó a su padre, Joel Sr., con mucho miedo. Le dijo tres palabras cortas pero poderosas: “Te amo, papá”.
Joel Sr. comenzó a llorar y le dijo también a su hijo que lo amaba. Son palabras que al exboxeador y ahora promotor le hubiese gustado escuchar de sus padres cuando él estaba creciendo.
“Cuando ella estaba viva, nunca me dijo que me amaba, que me extrañaba, nunca me expresó cariño, amor”, dijo De la Hoya, 50, quien ganó 11 títulos mundiales en varias categorías de peso, en entrevista teléfonica con LA Times en Español.
Por eso, el oriundo del Este de Los Ángeles contó que recientemente tomó la iniciativa con su padre, como parte de su “sanación”, y ahora comprende sobre la importancia de la comunicación entre padre e hijos.
“Es nuestra cultura. Mi papá es un macho, un señor fuerte, pero ¿por qué es así?, imagínate el papá de él, que tan fuerte era, la disciplina que le daba. Se lo dije porque él nunca me lo iba a decir a mí”, afirmó De la Hoya.
“Yo sé que me ama pero a veces quieres escucharlo”, dijo De la Hoya.
La comunicación entre las familias latinas muchas veces no es la mejor, debido a la cultura, el machismo y la educación, y son temas que se reflejan en el documental de HBO llamado “The Golden Boy”. El film de dos partes dirigido por el cineasta ecuatoriano Fernando Villena (“Dear Rider” y “Any One of Us”) indaga sobre la compleja relación que el exboxeador tenía con sus padres, el poco tiempo que tuvo para prepararse para el éxito, el dinero y la fama; además de sus adicciones, y temas muy sensibles, como su matrimonio fallido y fotografías vergonzosas que salieron a la luz en 2007.
La primera parte de la serie de dos se estrena el lunes, 24 de julio a las 9 p.m. Hora del Pacífico, seguido por el segundo episodio al día siguiente a la misma hora en HBO. Los actores Mark Wahlberg y Mario López actuaron como productores ejecutivos de la producción de HBO, que recientemente tuvo su estreno mundial en el Festival de Tribeca 2023.
Para aquellos que han seguido de cerca la vida del expugilista angelino, saben que el tema de la madre es complejo como un laberinto. Y este documental enseña que la complejidad puede ser aún más extensa y oscura.
El primer capítulo introduce como el jóven fenómeno se convirtió en una figura mediática, pero a pesar de sus numerosos galardones y de su inmensa popularidad, existe la tristeza de perder a la figura más fuerte en su familia, su madre.
Cecilia, madre de De la Hoya e inmigrante de México, murió de cáncer de seno en octubre de 1990, a los 38 años, cuando De la Hoya tenía 17. Durante décadas, la narrativa era que Cecilia falleció deseando que su hijo boxeador triunfara en los Juegos Olímpicos, como finalmente ocurrió al ganar la medalla de oro tras su triunfo sobre el alemán Marco Rudolph en las Olimpiadas de 1992.
El documental tiene una revelación importante al respecto, pues De la Hoya da detalles sobre esos últimos momentos que vivió como adolescente junto a su mamá, en una relación con muchas características disfuncionales. De la Hoya parece luchar con él mismo para descifrar la complicada relación con su madre, a quien no alcanzó a ver antes de morir y que nunca él le pudo decir que la amaba.
“Los seres humanos somos complicados. Los seres humanos solo queremos ser amados”, declaró el cineasta del film, Villena. “Muchos de nosotros tenemos diferentes relaciones con nuestros padres. Especialmente en nuestros años formativos. Lo trágico para Óscar es que nunca pudo desarrollar la relación con su mamá porque murió tan joven. Y hubo tantas cosas por decir”.
“Lo que encuentro fascinante es cómo la relación con su madre se desarrolló después de que ella murió”, indicó Vallerde. “Tuvo un acercamiento con su mamá después de que falleció”.
Villena, nacido en Guayaquil, Ecuador, trabajó en su primer proyecto sobre boxeo y señaló que al hablar con De la Hoya sobre el documental, se dio cuenta que para llegar a la verdad tendría que ser un proceso lento.
“No es fácil de desempacar 40 años”, indicó Villena, quien habló con De la Hoya en más de 30 sesiones y 50 horas de material grabado.
La segunda parte narra el crecimiento del imperio de Golden Boy Promotions, así como su incursión en el entretenimiento con el lanzamiento de un álbum de música pop latina. Pero a pesar de tratar de tener un matrimonio tradicional con su esposa Millie, los vicios y las malas decisiones lo hicieron caer en una de las situaciones más incómodas para el ‘Golden Boy’ a través de los años: las fotos en 2007 en las que aparece en ropa de mujer junto a una bailarina exótica, lo cual le trajo muchos problemas a su reputación y a sus socios.
Villena comentó a LA Times que al comenzar el proyecto no sabía sobre las fotos y fue por medio de la investigación que le comentó a su equipo sobre ellas y por supuesto, sus colegas sí sabían del tema. Fue el mismo De la Hoya que le pidió a HBO que encontrarán a Milana y el equipo de producción fue hasta Guatemala para entrevistarla, para contar esa etapa de la vida del expugilista de una manera honesta, sin sensacionalismo.
“Fue otra ocasión en la que Óscar necesitaba amor, un hombro para llorar y ser quién quería ser”, opinó Villena.
El documental también tiene las voces de su hermano Joel y padre Joel Sr., así como sus hijos Atiana, Devon, Jacob y su expareja, Shanna Moakier.
Los hijos de De la Hoya, con diferentes mujeres, cuentan su relato de cómo es vivir con un padre, muy lejano en ocasiones, y en otras, que desaparece por años después de convivir con ellos por unas horas. El film también ofrece un vistazo en la forma en la que ellos mismos han podido contrarrestar esa figura ausente. Ellos parecen comprender las limitaciones de comunicación y afecto que su padre sufrió de pequeño y han logrado vencer varias barreras de comunicación entre su padre y ellos, algo que el mismo Óscar califica como “muy maduro y orgulloso” de ellos.
“El film creo que crea una diferente avenida para que tenga una diferente relación con sus hijos y su familia”, expresó Villena.
De acuerdo a De la Hoya, él quería decir la verdad en este documental “para estar en paz” con él mismo y que desde hace años ha estado tratando de hacer un film así, pero no estaba listo. Gracias a horas y días de terapia, rehabilitaciones y la edad, le han permitido “curar su alma”.
”Óscar les dio permiso a todos los que entrevistamos, familiares, exparejas, les dio la libertad para decir lo que querían decir en cámara”, dijo Villena, quien dijo que la principal dirección de De la Hoya sobre el documental es que fuera directo y sin pintar las cosas color de rosa.
También existen declaraciones importantes del presidente de su promotora Eric Gómez, su exentrenador mexicano Jesús ‘Cholaín’ Rivero, su expromotor Bob Arum, y su socio Bernard Hopkins.
Según Villena, trabajar con De la Hoya fue como “regresar a casa” pues comenzó a trabajar en el proyecto cuando vivía en Boyle Heights. En este su cuarto proyecto como cineasta, el trabajo con una figura como el ‘Golden Boy’ le dio “apetito para más”.
“Quiero explorar más historias latinas, en toda su complejidad y en toda su humanidad”, dijo Villena. “Cada historia como estas enseñan un lado de la experiencia mexicoamericana. Cada que una de estas historias salen a la luz, nuestra experiencia en este país sale a la luz”.
“Hay un poder en decir la verdad”, finalizó Villena.
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